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¿Quieres preparar algo rico y original para sorprender a tus amores el 14 de febrero? Estas tartas para San Valentín son exactamente lo que estás buscando: originales pero fáciles, románticas y deliciosas. Hemos pensado a tartas de San Valentín de todo tipo: desde las más rápidas y sencillas tartas de hojaldre a las más elaboradas tartas fondant, para quienes quieren presumir de sus dotes de pastelería.
Claro está que no pueden faltar las tartas en forma de corazón, pero te proponemos muchas más ideas. Además te contaremos cuáles son los utensilios e ingredientes que no pueden faltar en tu cocina para preparar tartas originales de San Valentín y muchas cosas más, porque te servirán en muchas ocasiones.
Tarta de chocolate blanco para San Valentín
Esta tarta para San Valentín en forma de corazón es una delicia, perfecta para los amantes del chocolate blanco. Lleva una base de bizcocho, y luego una mousse de chocolate blanco que no necesita horno. Lo que sí necesitaréis es un molde en forma de corazón (podéis comprarlo aquí ), una buena inversión que podréis utilizar todo el año para vuestros bizcochos.
Ingredientes
Bizcocho
- 1 huevo
- 30 g harina
- 30 g azúcar
- 1 cucharadita pasta de vainilla
Tarta chocolate blanco
- 400 g chocolate blanco
- 80 g azúcar
- 400 g nata para montar 35%mg
- 4 claras de huevo
- 6 hojas de gelatina
- Para decorar: chocolate blanco rallado o mejor aún, sprinkles de corazones (puedes comprarlos aquí)
PODÉIS VER LA RECETA DE LA tarta de chocolate blanco AQUÍ:
Tarta de fondant para San Valentín
¿Tienes alma de Cake Designer? Pues tu tarta de San Valentín es este bizcocho en forma de corazón decorado con fondant.
Ingredientes: 1 bizcocho en forma de corazón, te aconsejamos el bizcocho genovés; la crema para rellenar tartas que prefieras; buttercream de merengue (la dosis de la receta te alcanzará); aproximadamente 1 kg de fondant blanco (puedes comprarlo aquí); un poco de fondant rojo (puedes comprarlo ); sprinkles de corazones (puedes comprarlo aquí)
Cómo hacer una tarta fondant de San Valentín
Una vez que el bizcocho está frío, lo cortamos a la mitad (o en tres), calamos con un poco de almíbar y rellenamos con nuestra crema preferida. Dejamos reposar en la nevera por lo menos 1 hora. Mientras tanto preparamos la buttercream de merengue (en los ingredientes os hemos dejado el enlace a la receta). Cuando está lista con una espátula como esta) recubrimos la tarta con una capa fina para sellar las migas, y la dejamos en la nevera 3o minutos. Mientras tanto la buttercream la mantenemos a temperatura ambiente.
Una vez que la capa “sellamigas” endureció, con la misma espátula cubrimos la tarta con una capa de buttercream más gruesa, dejándola lo más lisa que podamos. Debemos tener en cuenta que las imperfecciones luego se verán en el fondant, así que dedicad un rato a alisar bien. Volvemos a poner en la nevera unos 30 minutos, la crema tiene que ponerse bien dura.
Amasamos unos segundos el fondant blanco hasta que esté elástico. Espolvoreamos la mesa de trabajo con un poco de aúcar glass o maizena y con un rodillo estiramos el fondant a unos 5 mm de grosor, tenemos que obtener una placa de fondant de tamaño suficiente a cubrir la tarta. Enrollamos sin presionar el fondant sobre el rodillo para transportarlo sobre la tarta, lo extendemos y con las manos, suavemente, lo vamos haciendo adherir primero en la parte superior, y luego en los lados, de arriba hacia abajo. Cuando el fondant está bien adherido y liso, cortamos el excedente.
En este vídeo podéis ver cómo se va llevando el fondant para cubrir la tarta sin pliegues:
Una vez que tenemos la tarta forrada, con un cortador en forma de corazón (como este) cortamos corazones de fondant rojo y los pegamos por encima de la tarta, solo necesitamos humedecer apenas con un pincel con agua para que se peguen. Con los sprinkles de corazones decoramos los lados del pastel, pegándolos siempre humedeciendo el fondant con un pincel con poquita agua.
No os perdáis nuestras recetas de tartas fondant donde además encontraréis más trucos y consejos para utilizar el fondant:
Tarta fácil de San Valentín con hojaldre
Con dos láminas de hojaldre o de masa quebrada podemos hacer tartas fáciles de San Valentín que además de deliciosas sean muy vistosas. Para el relleno podéis optar por mermeladas de buena calidad o por fruta, sobre todos fresas o frutos rojos para aprovechar el color tan apropiado para esta fecha. Os proponemos dos recetas de tartas originales de San Valentín con fruta:
Tarta de manzana y cerezas
Ingredientes: 2 láminas de hojaldre o masa quebrada (o puedes prepararla tú mismo como hemos hecho nosotros con nuestra receta de masa quebrada); unos 500 g de cerezas sin hueso en almíbar; 1 manzana roja; 2 cucharadas de azúcar; opcional: algunos arándanos rojos.
Extendemos una de las láminas de masa en un molde en forma de corazón como este o este, previamente engrasado con aceite o mantequilla.
Rellenamos con 3/4 partes de las cerezas. Podemos añadir también algunos arándanos rojos u otra fruta similar si os gusta.
Cortamos la manzana en rebanadas finas y las distribuimos encima de las cerezas. Luego distribuimos por encima el resto de las cerezas.
Con un cortador de galletas en forma de corazón (como este) cortamos algunos huecos sobre la otra lámina de masa (que tiene que estar bien fría para que no pierda la forma). Disponemos la tapa sobre la tarta, sellamos los bordes y espolvoreamos con azúcar.
Llevamos al horno precalentado a 180°C (calor arriba y abajo) por unos 30-35 minutos, o hasta que la tarta esté dorada.
Tarta de fresas fácil para San Valentín
Ingredientes: 2 láminas redondas de hojaldre o masa quebrada (o puedes prepararla tú mismo como hemos hecho nosotros con nuestra receta de masa quebrada); 800g de fresas; 2 cucharadas de azúcar; 1 cucharada de Maizena; el zumo de 1/2 limón
Lavamos bien las fresas y las cortamos en trocitos pequeños, vertemos las fresas en un cuenco junto con dos cucharadas de azúcar, 1 cucharada de Maizena y zumo de medio limón. Mezclamos todo bien. Disponemos una de las láminas de hojaldre (sin quitar el papel) en el molde escogido, rellenamos con las fresas y cubrimos o decoramos con la otra lámina de masa, Podemos cortar corazones con un cortador de galletas como este y disponerlos encima como en la foto de aquí arriba, o por todo el borde como en la foto de abajo. Pintamos con huevo batido y llevamos al horno precalentado a 180°C (calor arriba y abajo) por unos 30 minutos, o hasta que la tarta esté dorada. Dejamos templar sobre una rejilla, podemos comerla tanto fría como templada.
Como hemos dicho al principio, una buena mermelada de frutas también es una opción sencilla para el relleno, con una mermelada de frutos rojos el contraste será bellísimo:
Bizcocho de San Valentín
Bizcocho con corazón sorpresa
¿Qué os parece un bizcocho para San Valentín con sorpresa? Este bizcocho en apariencia es un bizcocho tradicional, pero al cortarlo esconde un corazón. Es muy sencillo de hacer, no necesitas nada más que un molde de plum cake y un cortador de corazón:
Bizcocho en forma de corazón
Puedes utilizar cualquier receta de bizcocho para hacer un bizcocho de San Valentín. Solo tienes que usar un molde bonito como este , añadir fresas o cerezas partidas en la masa para darle un toque de color, y espolvorear antes de servir con azúcar glas.
Escoge tu receta:
Tarta corazón para San Valentín
¿Y si os decimos que estas auténticas obras de arte son en realidad muy sencillas de hacer? Necesitáis un molde de silicona en forma de corazón, que puede ser en mini porción como este, o grande como este, preparar el bizcocho que más os guste y luego cubrirlo con un glaseado espejo, os explicamos cómo se hace aquí:
Moldes y utensilios para hacer Tartas de San Valentín
Para hacer todas estos pasteles de San Valentín os hemos sugerido algunos moldes y utensilios muy útiles, que además vais a poder utilizar en cualquier momento del año, sobre todo si sois aficionados a las pastelería. Os aconsejamos comprar con antelación para que lleguen a tiempo, sobre todo para evitar imprevistos con el transporte como ha pasado en los días pasados con las nevadas que hemos tenido.
Los moldes en forma de corazón son perfectos para hacer tartas y bizcochos todo el año, no solo para San Valentín. Para tartas como la primera que hemos visto, la tarta de chocolate, es importante que el molde sea desmontable. Un molde desmontable es además muy indicado para todos aquellos pasteles que no podemos girar para desmoldar. Aquí tenéis algunos ejemplos:
Para tartas estilo Apple Pie, que se pueden servir templadas sin tener que desmoldar, lo más indicado son moldes de cerámica, que no se rayan si cortamos la tarta directamente en el molde:
- Apto para todos los postres afrutados y puede ser utilizado para hacer todo tipo de pasteles
- Resistencia contra choques mecánicos, cambios de temperatura y contra el desvanecimiento de los...
Para bizcochos podemos usar también moldes de silicona, que además nos sirven para postres fríos porque podemos ponerlos en el congelador:
Y por último, un molde en forma de corona elegantísimo, perfecto para cualquier ocasión:
- Hecho de aluminio fundido a presión, para una cocción perfecta y una limpieza óptima
- Con recubrimiento antiadherente
Otro utensilio que no os puede faltar y que usaréis en muchas ocasiones son los cortadores para galletas, por supuesto en forma de corazón:
Ya tenéis todas las recetas de tartas para San Valentín que necesitabais ¿cuál habéis escogido para este año?
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