¿Sabíais que la piel de limón posee propiedades nutricionales? Las cáscaras de limón contienen vitaminas, minerales y fibras –como calcio, potasio y vitamina C– que pueden dar un pequeño aporte nutricional a nuestra dieta. A pesar de que tendríamos que consumir grandes cantidades de cáscara para obtener beneficios nutricionales significativos, siempre es una buena idea aprovechar los restos de lo que cocinamos, y además el sabor y el perfume del limón ¡son inigualables!
Con estos 9 usos para la piel de limón en la cocina, podréis preparar muchas recetas deliciosas con el limón como protagonista. Veamos juntos estas ideas…
Para cualquiera de los usos que le queráis dar, hay que tener en cuenta algunos detalles importantes:
- usar limones de cultivación biológica para que la piel esté libre de pesticidas.
- utilizar sólo la parte amarilla de la piel, ya que la parte blanca tiene gusto amargo.
- lavar muy bien los limones antes de usarlos, preferiblemente en agua con 1 cucharadita de bicarbonato de sodio.
- 1º uso para la piel de limón: como aromatizante y saborizante
- 2º uso para la piel de limón: cáscaras confitadas
- 3º uso para la piel de limón: azúcar aromatizado
- 4º uso para la piel de limón: aceite aromatizado
- 5º uso para la piel de limón: aroma de limón casero
- 6º uso para la piel de limón: cubitos de hielo
- 7º uso para la piel de limón: mantequilla de hierbas y limón
- 8º uso para la piel de limón: azúcar moreno siempre suelto
- 9º uso para la piel de limón: limoncello
1º uso para la piel de limón: como aromatizante y saborizante
Este es el uso que normalmente le damos a la cáscara de limón. Sobre todo en platos dulces como el bizcocho de limón, la ralladura es un ingrediente habitual, pero ¿sabíais que la podéis congelar? De esta manera tendréis siempre a disposición la ralladura para vuestras recetas, y aprovecharéis la piel de los limones.
2º uso para la piel de limón: cáscaras confitadas
Las cáscaras de limón confitadas son muy simples de preparar y pueden comerse solas, o utilizarlas para saborizar y decorar muchas recetas dulces, por ejemplo el clásico roscón de Reyes. Para preparlas, cortamos en tiritas la cáscara de 10 limones, las ponemos en una olla cubiertas de agua y las hervimos por 2 minutos; dejamos enfriar, colamos y repetimos la operación dos veces más. Después de la 3º hervida, las colamos y las pesamos. En una olla preparamos un almíbar con la misma cantidad de azúcar y de agua del peso de las cáscaras (si por ejemplo las cáscaras pesan 100 gr., hacemos el almíbar con 100 gr. de azúcar y 100 de agua). Ahora cocinamos a fuego bajo las cáscaras en el almíbar hasta que éste se seque, prestando atención a que no se caramelice. Cuando terminamos la cocción, las dejamos secar sobre papel de horno, y si queremos antes que se sequen las pasamos por azúcar.
3º uso para la piel de limón: azúcar aromatizado
Para dar un toque cítrico al azúcar, ideal para acompañar un té o infusiones, o para dar un toque especial a algún bizcocho, sólo necesitamos azúcar y cáscara de limón. Por cada 100 gr. de azúcar usaremos 10 gr. de ralladura, tanto fresca como seca. Si usamos cáscara fresca, mezclamos la ralladura con el azúcar, y antes de guardarlo en un frasco hermético, hay que dejarlo secar en un lugar seco hasta que el azúcar esté de nuevo suelto. Si en cambio usamos ralladura secada previamente en el horno (a 180º hasta que esté crujiente), la trituramos con un mixer y la mezclamos con el azúcar.
4º uso para la piel de limón: aceite aromatizado
Es un aceite especial que se usa en crudo. Para preparlo, lavamos bien dos limones y cortamos con un cuchillo afilado sólo la parte amarilla de la piel, y la ponemos en la botella con 1 litro de aceite de oliva. Para que el sabor sea intenso dejamos reposar por 1 mes. No hace falta filtrarlo.
5º uso para la piel de limón: aroma de limón casero
En repostería usamos mucho los aromas, pero los concentrados que compramos en la tienda tienen agregados químicos. ¿Por qué no preparar nuestro aroma de limón casero? Sólo necesitamos piel de limón rallada, un frasco de cristal y azúcar. Con el frasco perfectamente limpio, vamos alternando dentro capas de azúcar y de ralladura, comenzando y terminando con el azúcar, y prensando bien entre capa y capa. Las capas de limón deben ser de aprox. 5 mm. y la última capa de azúcar un poco más alta. Cerramos bien el frasco y lo llevamos a la nevera; después de algunas horas, veremos cómo el limón comienza a perder su aceite, mezclándose con el azúcar y creando una preparación de color y consistencia homogénea. Cuando estarán perfectamente unidos, podemos comenzar a utilizar el aroma en nuestras recetas, con menos de una cucharadita es suficiente para aromatizar bizcochos y masas dulces. Se conserva varios meses en la nevera.
6º uso para la piel de limón: cubitos de hielo
Para dar un toque original y gustoso a vuestros tragos veraniegos, podéis usar uno de esos ralladores especiales que sacan la piel en tiritas, ponerlas en la cubetera junto con el agua, y obtendréis cubitos de hielo chulos y bebidas con un toque de sabor cítrico que en verano viene muy bien.
7º uso para la piel de limón: mantequilla de hierbas y limón
Otro uso poco convencional que podemos darle a la ralladura de limón es saborizar con ella la mantequilla. Esta mantequilla de hierbas y limón es perfecta para preparar y condimentar pescado o pollo. Para prepararla usaremos un mix de hierbas aromáticas, mantequilla a temperatura ambiente y ralladura de limón. Batimos todos los ingredientes juntos hasta que se forme una crema homogénea, luego la ponemos sobre un papel de horno y le damos forma cilíndrica, envolviéndola con el papel. Se conserva en la nevera por 2 semanas o congelada 3 meses.
8º uso para la piel de limón: azúcar moreno siempre suelto
¿Cuántas veces hemos querido usar el azúcar moreno que teníamos guardado y nos encontramos con un bloque más duro que el mármol? Para que esto no suceda, basta poner un poco de piel de limón (sin partes blancas) dentro del azúcar para que no se apelmace y se mantenga siempre suelto.
9º uso para la piel de limón: limoncello
El limoncello es un licor de limón típico del sur de Italia, muy perfumado y con un sabor fuerte. Prepararlo es muy simple, pero es necesario seguir los pasos meticulosamente. Los limones ideales para hacerlo son los de cáscara gruesa y rugosa. Necesitamos 10 limones grandes, 1,2 kg. de azúcar, 1,5 l. de agua y 1 l. de alcohol puro. Pelamos los limones y cortamos la piel (prestando atención a eliminar todas las partes blancas) en tiras, que pondremos a macerar por un mes en 750 cc. de alcohol, dentro a un envase de cristal hermético, en un lugar oscuro y fresco. Pasado ese tiempo, hacemos hervir el agua y agregamos el azúcar, girando hasta que se disuelva. Dejamos enfriar el almíbar obtenido, y luego lo agregamos, junto con el resto del alcohol, en el envase con la piel en maceración. Cerramos de nuevo el envase y dejamos reposar por otros 40 días. Pasado este tiempo, lo colamos, lo ponemos en una botella de cristal y lo mantenemos en el congelador, para poder consumirlo bien frío.
¿Qué os han parecido estas ideas para utilizar las cáscaras de los limones?
Vía: Just Imagine
2 comentarios
ant
usos limón
Natividad
Muy buena las utilidades de la cascara de limon