Nos encantan los mejillones cocinados de todas las formas posibles, pero limpiar mejillones es otro cantar… Sin embargo no vamos a renunciar a este tesoro que nos brinda el mar, porque con un poco de maña y la técnica adecuada verás que limpiar mejillones no es tan complicado.
Los mejillones son un tesoro culinario no solo por su delicioso sabor, sino también por sus impresionantes propiedades nutricionales. Son una excelente fuente de proteínas, vitaminas y minerales esenciales. Estos moluscos marinos proporcionan una abundante cantidad de vitamina B12, hierro, selenio y ácidos grasos omega-3, que son beneficiosos para la salud del corazón y el cerebro. Además, su bajo contenido calórico y alto contenido de proteínas los convierten en una opción saludable para aquellos que buscan mantener una dieta equilibrada.
Es por ello que hoy nos remangamos para aprender cómo limpiar mejillones paso a paso.
Cómo limpiar mejillones paso a paso
Paso 1. Elige mejillones frescos de calidad
Aquí hay algunos consejos para asegurarte de que estás adquiriendo los mejores mejillones:
- Inspecciona la concha: Cuando estés en la tienda o en el mercado, observa las conchas de los mejillones. Los mejillones frescos deben estar cerrados o, al tocarlos, deben cerrarse de inmediato. Esto es un indicador de que están vivos y saludables. Si encuentras mejillones con las conchas abiertas que no se cierran al tocarlos, es probable que estén muertos y no sean aptos para su consumo.
- Evita las conchas rotas: Examina cuidadosamente las conchas de los mejillones en busca de fisuras profundas o roturas significativas. Los mejillones frescos deben tener conchas intactas o ligeramente abiertas, lo que es normal. Sin embargo, si ves mejillones con conchas rotas o con fisuras evidentes, es mejor evitarlos, ya que podrían haberse dañado durante el manejo y no serán frescos.
- Olfatea el marisco: Aprovecha la oportunidad para oler los mejillones. Deben tener un aroma fresco y agradable a mar, similar al agua de mar. Si detectas un olor desagradable, como amoníaco o cualquier olor fuerte y desagradable, es señal de que los mejillones no están frescos y debes evitarlos.
Paso 2. Lava los Mejillones
La limpieza adecuada de los mejillones es esencial para garantizar que tu plato final esté libre de arena o cualquier suciedad superficial que pueda afectar su sabor. Sigue estos pasos para limpiar tus mejillones de manera eficaz:
- Enjuaga bajo agua fría: Comienza colocando los mejillones en un colador o recipiente grande. Luego, enjuágalos abundantemente bajo un chorro de agua fría corriente. Este paso inicial ayudará a eliminar cualquier residuo suelto, arena o impurezas superficiales de las conchas.
- Utiliza un cepillo de cocina o estropajo de aluminio: Después del enjuague inicial, toma un cepillo de cocina limpio y de cerdas suaves. Con el cepillo, frota suavemente la superficie de las conchas de los mejillones. Esto es especialmente importante para eliminar cualquier restante de arena o suciedad que pueda adherirse a las conchas. Asegúrate de cepillar todas las partes de las conchas, incluidos los bordes. También puedes utilizar un estropajo de aluminio o Nanas para limpiarlos.
- Enjuaga de nuevo: Después de cepillar las conchas, vuelve a enjuagar los mejillones bajo agua fría para eliminar cualquier residuo que se haya desprendido durante el cepillado. Asegúrate de que el agua de enjuague esté lo más limpia posible antes de pasar al siguiente paso.
- Desecha los mejillones abiertos o dañados: Mientras los estás limpiando, verifica nuevamente que todos los mejillones estén cerrados o que se cierren cuando los toqueso les des un ligero golpe. Si encuentras mejillones abiertos que no se cierran o con conchas dañadas, descártalos, ya que podrían no ser seguros para su consumo.
Paso 3: Desbarba los mejillones
Los mejillones a menudo tienen una parte fibrosa que se conoce como “barba”. Esta barba se extiende desde la concha y debe ser eliminada antes de la cocción. Sigue estos pasos para desbarbar los mejillones de manera eficaz:
- Sujeta firmemente el mejillón: Toma un mejillón en una mano. Debes sostenerlo de manera segura para evitar que se escape mientras trabajas en la barba.
- Ubica la barba: Observa la parte de la concha donde la barba está unida. Verás una pequeña protuberancia oscura y fibrosa que se extiende desde la concha. Esta es la barba que necesitas eliminar.
- Tira en dirección contraria: Con cuidado pero firmeza, tira de la barba hacia abajo en dirección opuesta al borde de la concha. Debería desprenderse fácilmente si aplicas una presión constante. Asegúrate de tirar de toda la longitud de la barba para eliminarla por completo.
- Verifica la limpieza: Después de eliminar la barba, verifica nuevamente que no quede ninguna fibra en el mejillón. Asegúrate de que esté completamente limpio antes de continuar con la preparación.
- Repite con los demás mejillones: Repite este proceso con cada mejillón que planeas cocinar. No omitas ningún mejillón, ya que la barba puede afectar la textura y la experiencia al comer.
Paso 4: Verifica los Mejillones
- Revisa el estado de las conchas: Después de desbarbar los mejillones y antes de cocinarlos, es esencial verificar nuevamente el estado de las conchas. Asegúrate de que todas las conchas estén cerradas o se cierren cuando las toques. Los mejillones abiertos son un signo de que podrían estar muertos y, por lo tanto, no aptos para el consumo.
- Descarta las conchas rotas o dañadas: Además de verificar si las conchas están cerradas, asegúrate de examinarlas en busca de conchas rotas o dañadas. Si encuentras mejillones con conchas rotas, es mejor desecharlos, ya que podrían haberse dañado durante el transporte o el almacenamiento y no serán seguros para su consumo.
Cómo almacenar mejillones
Lo ideal para asegurarte de la frescura de los mejillones es comprarlos el mismo día que los vas a consumir, así aseguras que están frescos. No obstante si tienes que consumirlos al día siguiente lo ideal es guardarlos envueltos en un paño húmedo en un bol grande dentro del frigorífico.
No los sumerjas en agua porque podrías ahogarlos. Y recuerda revisar de nuevo si están en buenas condiciones antes de cocinarlos. Para ello tienes que recordar que antes de cocinar deben estar cerrados, y una vez cocinados deben estar abiertos. Si cualquiera de estas condiciones no se cumplen descártalos para evitar una intoxicación alimentaria.
Preguntas frecuentes sobre los mejillones
Aquí tienes las respuestas a algunas de las preguntas más frecuentes sobre la preparación y cocción de mejillones:
¿Cuánto tiempo se pueden almacenar los mejillones en la nevera?
Los mejillones frescos se pueden almacenar en la nevera durante un período de 1 a 2 días después de la compra. Es importante comprarlos el mismo día que planeas cocinarlos para asegurarte de que estén en su mejor momento.
¿Cómo puedo saber si un mejillón está muerto?
Un mejillón fresco y vivo estará cerrado o se cerrará cuando lo toques. Si encuentras mejillones abiertos antes de cocinarlos, dale un suave golpecito. Si el mejillón no se cierra, es probable que esté muerto y debe desecharse. Además, asegúrate de que no tengan un olor desagradable, ya que esto también puede indicar que están en mal estado.
¿Puedo congelar mejillones frescos?
Sí, puedes congelar mejillones frescos, pero es importante hacerlo correctamente.
- Congelación de Mejillones Frescos:
- Lava y limpia los mejillones antes de congelarlos.
- Coloca los mejillones en una bolsa hermética o un recipiente adecuado para congelar.
- Descongelación Adecuada:
- Cuando desees cocinar los mejillones congelados, es importante descongelarlos lentamente en el refrigerador. Esto evita cambios bruscos en la textura y el sabor.
- Nunca descongeles mejillones a temperatura ambiente, ya que esto puede promover el crecimiento de bacterias.
- Se deben cocinar inmediatamente después del descongelado, no esperes porque se pondrán malos enseguida.
Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de los mejillones frescos incluso después de congelarlos, siempre que sigas las prácticas adecuadas de almacenamiento y descongelación.
¿Cuál es la mejor forma de cocinar mejillones?
La elección de la mejor forma de cocinar mejillones depende de tus preferencias personales. A nosotros nos encantan los mejillones al vapor que es la forma más sencilla de preparación. Pero también nos chiflan otras preparaciones, como los mejillones a la marinera, o los mejillones en salsa de tomate picante, que son algunas recetas muy populares y que te dejamos aquí detalladas:
Otras formas de prepararlos que te recomendamos son los mejillones tigres, los mejillones al curry con leche de coco, o los mejillones con nata y vino blanco.
No te pierdas nuestras recetas con mejillones, ¡tenemos muchas!