Cortar y pelar una calabaza para elaborar diferentes recetas puede ser fácil si sigues alguno de estos consejos.
Cómo pelar y cortar una calabaza
Para pelar y cortar la calabaza existen dos opciones. Una de ellas es ayudándonos del horno (recomendado para la Cucúrbita Máxima, ya que su piel es muy dura), y la segunda en crudo (podemos utilizar esta técnica con la calabaza cacahuete, con la piel algo más fina), como te explicamos más abajo.
Pelar la calabaza ayudándonos del horno
Cuando pensamos en recetas de calabaza normalmente nos echa para atrás el hecho de tener que cortarlas.
- Para hacerlo de forma sencilla te recomendamos primero introducir la pieza entera, limpia y con algunas incisiones realizadas con la punta del cuchillo, en el horno a 200º C.
- Pasados unos 10-20 minutos (según el peso de la calabaza), la piel estará algo más blanda y se podrá pelar con facilidad.
- Córtala primero por la mitad y luego en gajos para que resulte más fácil, y ayudándote de un cuchillo afilado podrás quitar la piel con facilidad.
- Luego córtala en trozos regulares para poder utilizarla en tus recetas.
Cómo pelar una calabaza cacahuete en crudo sin horno
- Para pelar una calabaza cacahuete cruda sin hornear, primero quitamos los dos extremos.
- Luego ayudándonos de un pelador vamos quitando la piel
- Cuando la hayamos eliminado completamente la partimos por la mitad.
- Eliminamos las semillas con una cuchara
- Cortamos en bastones con un cuchillo y luego en cubos.
En este vídeo puedes verlo con detalle:
Tipos de calabaza
La calabaza (también llamada zapallo, auyama, pipián o ayote, según en qué país de habla hispana te encuentres) es una hortaliza típica del otoño, aunque se pueden encontrar diferentes variedades durante todo el año.
La familia de las cucurbitáceas, a la que pertenecen las calabazas, cuenta con unas 850 especies de plantas (el melón, la sandía, el pepino y el calabacín pertenecen a esta familia)
Existen muchas variedades de calabaza, pero fundamentalmente hay calabazas de invierno y calabazas de verano. Las de verano son las que tienen la piel más fina, y se conservan por menos tiempo; las de invierno tienen la piel gruesa, y pueden durar varios meses.
Entre las variedades más comunes se encuentran:
- Calabaza Cucúrbita Máxima: son de las más conocidas; son grandes y anaranjadas, como las calabazas de Halloween. Son perfectas para hacer crema de calabaza o puré, pastel de calabaza, y también para hacerla al horno.
- Calabaza Bonetera o Patisson: Su forma achatada y su color blanco llaman la atención. Es una calabaza de verano que se puede consumir con piel, ya que es muy fina. Se utiliza para cremas y purés, salteados y rebozados.
- Calabaza Cacahuete: es una variedad muy popular, con forma de pera alargada. Es muy versátil y se puede preparar en de cualquier modo.
- Calabaza Cabello de ángel: se utiliza para hacer el dulce cabello de ángel. Es redonda, con piel verde y amarilla, con pulpa casi blanca y semillas oscuras.
Propiedades de la calabaza
¿Sabías que la calabaza es rica en fibra, en betacarotenos y antioxidantes? ¿Y que tiene pocas calorías por lo que puedes comerla si quieres perder peso? Si quieres conocer todas las propiedades de la calabaza para la salud lee nuestro artículo, donde te lo explicamos con detalle:
Recetas con calabaza
Una vez tengas tu calabaza pelada tienes que aprovecharlas con alguna de estas recetas con calabaza, tanto dulces (como el bizcocho de calabaza, la tarta de calabaza, los buñuelos de calabaza, o la mermelada de calabaza), o saladas, como el hummus de calabaza, el risotto de calabaza, o la lasaña de calabaza y pollo).