Cardo con almendras (receta tradicional)

Este cardo con salsa de almendras me ha gustado tanto que ya la he incluido dentro de mi menú semanal familiar, porque ha sido un éxito rotundo.

El cardo con almendras es una receta tradicional que se consume habitualmente en invierno, porque su época de recolección comienza a finales de otoño y se extiende durante los meses de invierno. Pero desde que he descubierto el cardo congelado no veo el motivo para no extender su consumo al resto del año, porque os aseguro que es una hortaliza excepcional en sabor y que nos permite hacer platos tan ricos como el que estamos haciendo hoy.

Además esta receta con cardo es muy saludable, más abajo os explicamos los beneficios tanto del cardo como de la almendra para nuestra salud. Y lo mejor de todo es que resulta muy fácil de preparar, os sorprenderá qué rápido hacéis un plato perfecto no solo para comer cualquier día, sino como primer plato en cualquier celebración familiar. De hecho el cardo con almendras es una receta navideña que se consume en muchas regiones de España, como Aragón, Navarra, Madrid o Soria.

Nosotros vamos a desestacionalizar esta receta con cardo proponiendo hacerla en cualquier momento del año y ocasión, porque lo merece.

Cómo limpiar y cocinar los cardos frescos

Si habéis encontrado cardos frescos y queréis prepararlos primero tendréis que limpiarlos, porque es una verdura muy fibrosa que es necesario pelar y limpiar bien. En este vídeo podéis ver con detalle cómo limpiar cardos frescos que, tal como os comentábamos al principio podemos encontrar desde finales de otoño y durante todo el invierno, sobre todo en la zona de Navarra.

Pelarlos es relativamente fácil: hay que lavarlos bien, quitamos la parte de las hojas y la parte más leñosa del tallo y vamos eliminando las hebras más duras y la telilla que hay en la parte interior. Luego se cortan en trozos de aproximadamente 5 cm y se van poniendo en agua con limón, antes de ponerlos en la olla a hervir con un poco de sal.

Lo ideal es cocerlos en la olla express, porque tardaréis menos tiempo, unos 30 minutos, en caso de que lo hagáis en olla tradicional tardarán una hora aproximadamente. Para ver si están hechos lo mejor es pincharlos con un cuchillo y comprobar que se encuentran blandos.

Hay quien hace 3 cocciones, tirando el agua de cada cocción, primero un par de minutos hirviendo, se tira el agua, luego unos 10 minutos, y finalmente la cocción definitiva. De esta forma se evita que el cardo amargue.

Consejos para hacer la receta de cardos con salsa de almendras

Esta receta tiene, como todas las recetas populares, diferentes formas de hacerla, en la que fundamentalmente varían los ingredientes que se incorporan a la salsa de almendras.

La principal diferencia puede ser si te gusta la salsa más o menos fina. En nuestro caso nos gusta encontrar los pequeños trozos de almendra, por lo que intentamos que la almendra no esté muy molida. Pero si prefieres una roux fina te aconsejamos que la pases por la batidora y luego por un chino, o bien que utilices almendra molida, que la venden ya así. De esta forma tu salsa será ligera y sin los tropezones de la almendra.

En cuanto a los cardos, si los encuentras frescos te recomendamos probarlos, porque el esfuerzo de pelarlos merecerá la pena, pero si no los encuentras, o quieres comerlos fuera de temporada, la opción de comprarlos congelados, o incluso, en conserva, te ayudará a ahorrar mucho tiempo en esta receta.

Otra diferencia puede ser en echar o no cebolla, añadir nuez moscada, pimentón, uno o dos dientes de ajo, dependiendo de la potencia que le quieras dar a la salsa… prueba hasta que encuentres el sabor perfecto. en nuestro caso te podemos asegurar que la receta tal como te la hemos explicado ¡está para mojar pan y no dejar nada!

¿Por qué es aconsejable comer cardos con almendras?

Aparte de la obviedad de que es una receta deliciosa que os va a encantar, os vamos a explicar por qué esta es una receta que además de sabor nos puede aportar muchos beneficios para la salud.

Propiedades y beneficios del cardo

El cardo comestible, es una hortaliza la familia de las asteráceas, al igual que la achicoria, lechuga, endibia, escarola, o la alcachofa. Los romanos ya lo cultivaban y de hecho se consideraba un alimento de lujo reservado a las clases altas.

Como ocurre con otras verduras, tiene un alto contenido de agua, y apenas aporta unas 20 kcal por cada 100 gramos. Además, tiene un alto contenido en fibra, que nos ayuda a ir regularmente al baño y previene el estreñimiento. Es fuente de minerales como el potasio, el calcio, sodio, fósforo, hierro y selenio, y contiene muchas vitaminas, destacando la C y la B3, B2 y B1.

Esta verdura posee inulina, una sustancia que se encuentra en algunas plantas que, entre otras funciones destacadas, ayuda a reducir los niveles de colesterol e insulina en sangre, por lo que resulta muy saludable en especial para las personas con diabetes. Además la inulina también ayuda a mejorar la absorción de ciertos minerales como magnesio, fósforo y calcio (el cardo es una buena fuente vegetal de calcio).

También posee cinarina, un componente muy beneficioso para el organismo, conocido por sus propiedades para evitar  la acumulación de grasa en el hígado, prevenir la formación de piedras en la vesícula biliar, regular la formación del colesterol y evitar la retención de líquidos.

Propiedades y beneficios de las almendras

Las almendras son uno de los frutos secos más nutritivos que existen. Además son aptas para todos porque al contener un bajo índice glucémico son indicadas para personas con diabetes.

Fortalecen y protegen las paredes de las arterias gracias a los aminoácidos y ácidos grasos que contienen, por lo que ayudan a reducir el riesgo de infarto y otras enfermedades cardiovasculares.

Por su alto contenido de fósforo y magnesio, cuidan nuestros dientes y huesos, previniendo la osteoporosis. También cuidan nuestros músculos, combaten la ansiedad, la irritabilidad y favorecen un buen descanso, evitando el insomnio.

El zinc que contienen las almendras ayuda a fortalecer el sistema inmunitario, y combate el cansancio. La vitamina A que también tienen además ayuda a desintoxicar el organismo, y su contenido en selenio y vitamina E combate los radicales libres, y ayuda a prevenir enfermedades degenerativas.

Teniendo en cuenta los beneficios que os hemos mencionado tanto del cardo como de las almendras, ya podéis intuir por qué os recomendamos incluir la receta de cardo con almendras en vuestro menús familiar ¿verdad?

Si te gustan las recetas con verduras también te recomendamos probar esta selección de recetas con espinacas, un delicioso brócoli al horno, alguna de las recetas de coliflor al horno que te sugerimos, o, si buscas algo exótico, un wok de verduras oriental.