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Los tradicionales Mostachones de Utrera son unos bizcochos redondos y planos pegados a papel de estraza, muy populares no solo en Sevilla, de donde proceden estos famosos dulces (concretamente la localidad sevillana de Utrera), sino de toda Andalucía, ya que su popularidad se ha extendido y ya puedes encontrarlos en numerosas pastelerías tradicionales.
Si al oír mostachones piensas en grandes bigotes quítate esa idea de la cabeza, pues aunque divertida, nada tiene que ver con el origen del nombre del mostachón, que procede del latín hispánico “mostaceum” que significa bizcocho redondo.
El origen de la receta de los mostachones parece ser árabe, aunque fueron las Clarisas, en el siglo XIX las encargadas de preservar la receta y popularizarla. En la localidad sevillana de Utrera fundaron el convento de Santa María de Gracia, donde dieron a conocer estos Mostachones de Utrera tal como los conocemos hoy.
Lo curioso de este bizcocho de forma redondeada es que no lleva levadura, bicarbonato, ni ningún tipo de conservante, tan solo huevos, harina y azúcar (la canela es opcional), y sin embargo se conservan perfectamente durante bastante tiempo.
Receta de Mostachones de Utrera
Ingredientes
- 3 huevos
- 250 g de harina
- 250 g de azúcar
- 1 cucharadita de canela en polvo
Cómo hacer mostachones de Utrera
Preparamos la masa de los mostachones
- Precalentamos el horno a 180ºC
- Separamos las claras de las yemas
- Montamos las claras de huevo, añadiendo el azúcar poco a poco mientras se van montando.
- Vamos añadiendo poco a poco las yemas, y seguimos batiendo
- Añadimos la harina tamizada con la canela, y mezclamos con una espátula con movimientos envolventes.
Horneamos los mostachones
- Forramos una bandeja de horno con papel de hornear
- Ponemos una cucharada sopera de la masa, separándolas entre sí porque se expandirán con el horneado.
- Espolvoreamos con azúcar (nosotros hemos utilizado azúcar moreno)
- Horneamos durante 10 minutos hasta que estén ligeramente dorados, es importante no pasarse con el tiempo porque al ser una masa muy fina se nos quedarían duros y la textura debe ser esponjosa, similar a la de un bizcocho.
- Sacamos del horno y dejamos enfriar.
Cómo conservar y comer los Mostachones de Utrera
Una vez fríos los dejamos pegados en el mismo papel de horno, que recortaremos en cuadrados, ya que así se conservarán mejor. Los vamos apilando uno sobre otro cerrando los paquetes, y los guardamos en un recipiente hermético.
Para comerlos tan solo tenéis que despegarlos con cuidado del papel. Están deliciosos solos acompañados de un café, o si los rellenamos con alguna crema.
En este vídeo podéis ver más sobre la historia y tradición de los mostachones de Utrera:
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